martes, 2 de septiembre de 2008

El Gobierno en serios problemas

Estado acude a “salvafinanzas” El Gobierno ha tenido que acudir a deuda de corto plazo y más cara, así como a notas de crédito para pagar subsidios. Saca reconoce que de no encontrar un acuerdo para el refinanciamiento de deuda, este y el próximo Gobierno pueden tener más problemas de liquidez para enfrentar los diversos compromisos. Estela Henríquez/Karla Ramos politica@laprensa.com.sv

Fecha de actualización: 9/2/2008

El dinero que está ingresando, mes a mes, a las arcas del Estado se ha quedado corto para que este pueda cumplir con todos los pagos y compromisos financieros. Así, en los últimos meses el Gobierno se ha visto obligado a acudir a varios mecanismos financieros para obtener recursos (notas de crédito y letras del tesoro) para pagar desde salarios hasta subsidios.
Solo en LETES, que es una deuda que el Gobierno debe pagar en un plazo no mayor de un año, se registran, según estadísticas de la Bolsa de Valores (BVES), $480 millones colocados hasta julio, a una tasa de interés que se ha visto disparada en casi dos puntos desde enero. Solo en junio se hicieron dos colocaciones de $25 millones cada una, reveló el ministro de Hacienda, William Handal.
Un miembro del gabinete económico del presidente Antonio Saca explica que precisamente a finales de julio fue cuando se comenzaron a buscar acercamientos con instituciones financieras internacionales, para negociar préstamos por cerca de $1,000 millones que le den un respiro a este Gobierno y le dejen una mayor liquidez al que llegue después de marzo de 2009. En ese monto de negociación se incluye el refinanciamiento de $653 millones de bonos que se vencen en 2011.
“El Gobierno ha explorado esa posibilidad”, confirma Alberto Leyton, del Banco Mundial (BM), al asegurar que con ellos el actual Gobierno salvadoreño planteó un monto de hasta $500 millones en nueva deuda. “Todavía no hay pasos concretos en ese sentido, solo se han intercambiado algunas informaciones”, agrega, no sin antes reiterar que cualquier negociación, para ser efectiva, deberá pasar antes por el congreso.
Saca habla de medidas
El presidente, aunque reconoce que tocó las puertas de los organismos financieros, insiste en que las finanzas del país están bien. Sus palabras, sin embargo, se contradicen cuando acepta que han tenido problemas de pago de algunos subsidios “cuando no existe plata en las arcas públicas”. Esos problemas de liquidez admite que los ha resuelto con LETES y notas de crédito, que hoy cubren los subsidios que se adeudan a las eléctricas y gaseras. Este punto es ratificado por el secretario técnico de la presidencia, Eduardo Ayala Grimaldi, que confirma la venta de LETES.
Saca agrega que si no se logra resolver el problema de los eurobonos de 2011 “vamos a tener este y el próximo Gobierno que tomar medidas en su momento, que pueden ser de austeridad y ahorro, para pagar estos compromisos de país”. Eso sí, el mandatario, que hace solo unos días ofreció dejar un “país bien solvente”, afirma que esas medidas no implicarían un nuevo fideicomiso ni una reforma fiscal que incremente los impuestos.William Hándal, ministro de Hacienda, niega tajantemente que existan problemas financieros, pero dice que la reestructuración de deuda es necesaria: “La intención del presidente y este servidor es arreglar un problema de país a largo plazo y evitar afectar al futuro Gobierno, que no vaya a tener algún problema porque no pueda cubrir compromisos”. Handal asegura que la intención del actual gobierno es dejar el país “al menos con una liquidez igual” a como lo recibieron del anterior gobierno.
Ayala Grimaldi también afirma que una de las principales preocupaciones es dejar liquidez en las arcas del Estado para el nuevo Gobierno que llegue en junio de 2009. “Algo vamos a tener que hacer en las próximas semanas y ojalá logremos resultados positivos”, afirma al prever la posibilidad de no tener los votos para refinanciar la deuda, que requiere el apoyo del FMLN.
Fuentes cercanas a los equipos de los dos candidatos afirman que representantes de Rodrigo Ávila y de Mauricio Funes ya sostuvieron una reunión para ver si se desentrampan al menos $200 millones en créditos, pero no hay todavía un compromiso en firme en ese punto.
Y es que la colocación de deuda de corto plazo le está saliendo cara al Gobierno por el aumento en la tasa de interés. “Los mercados a escala internacional están bastante secos, no hay muchos recursos, no solo acá, sino afuera también. No se está desempeñando el mercado como siempre lo había hecho” justificó Ayala Grimaldi.

No hay comentarios: