martes, 26 de agosto de 2008

Ignorancia o ignorantes

Hallan vestigios de una “civilización perdida” en El Espino





El departamento de arqueología de Concultura descubrió en julio de 2007 y enero de 2008 vestigios arqueológicos de más de mil años de antigüedad en la zona donde se construye el Bulevar Diego de Holguín. Hasta hoy, el Ministerio de Obras Públicas y las autoridades de Concultura mantenían el hallazgo en secreto. La semana pasada, El Faro descubrió que en el sector poniente de la carretera aún en construcción, contiguo al nuevo edificio de Cancillería, el MOP encontró más cerámica prehispánica y tampoco informó nada. Los lugareños, que venden piezas libremente, hablan incluso de entierros. Un año después del hallazgo, gran parte de los vestigios están en proceso de destrucción.


Daniel Valencia* / Fotos por Mauro Arias y fotos tomadas del informe técnico de Departamento de Arqueología de CONCULTURA

http://www.elfaro.net/secciones/Noticias/20080825/noticias1_20080825.asp#cartasPublicada el 25 de agosto de 2008 - El Faro


Julio de 2007. La foto muestra un corte estratigráfico en una de las paredes durante la construcción del bulevar Diego de Holguín. Son evidentes zurcos de siembra, soterrados probablemente por cenizas de la erupción del volcán de Ilopango (aprox. 420 d.C.).


¿Qué sentiría si el próximo año, cuando usted circule por el bulevar Diego de Holguín, le cuentan que ahí, debajo del duro y frío concreto, se encuentran los restos de una civilización prehispánica hasta ahora desconocida? ¿Qué sentiría si se entera de que la evidencia de esta civilización se perdió para siempre? Pues estas posibilidades son las que involucra el tramo II del bulevar, publicitado como la “primera vía expresa” de El Salvador, y que en 2006 y 2007 puso en aprietos a tres ministros del gabinete por la depredación ambiental que causó en la finca El Espino (Hugo Barrera, David Gutiérrez y Carlos Guerrero).

Ahí, justo donde miles de árboles fueron talados para compactar la tierra que servirá de base para el cemento, hay restos arqueológicos. La evidencia científica ubica restos a lo largo del tramo de 4.9 kilómetros.


El Faro constató el pasado martes 19 de agosto, al poniente de la zona dañada del parque Los Pericos, dentro de una zanja de aproximadamente dos metros de profundidad -que servirá de desagüe para la mega carretera-, que los tractores de la empresa COPRECA destruyeron decenas de piezas arqueológicas entre ollas, figuras antropomorfas, vasijas, collares…
Esta zanja colinda con el nuevo edificio de Cancillería. La cantidad de material encontrado –y destruido- sobrepasa la imaginación, a juicio de los trabajadores de la obra. En el terreno, COPRECA trabaja desde mayo, metiendo la excavadora que abrió al menos 200 metros en línea recta hacia una quebrada cercana, atrás del mercadito de Merliot, entre el límite de Antiguo Cuscatlán y Ciudad Merliot.


“Yo encontré un muñequito hace como dos semanas. Estaba completito. Tenía la cara bien hechita de indio, estaba sentado, como amarrado de manos y pies. En la cabeza tenía como un hoyito, como que era para andarlo colgado”, dice uno de los jornaleros, pala en mano. Otro, retirado unos cinco metros, da muestras de cómo se encuentran los restos de cerámica. “Así, mire (hunde la pala en el lodo)”. Y, efectivamente, están casi a flor de tierra. “¿Ve? Ahí hay”, dice. En la tierra removida aparecen restos de lo que se presume fue una vasija.
A estas alturas, dentro de la zanja, ya sólo aparecen restos de vasijas rotas, asas de cántaros y piernas desmembradas de figuras antropomorfas. Ni los jornaleros, ni los supervisores de la obra ni las autoridades del MOP informaron nada, pese a que la ley de Patrimonio Cultural obliga a parar la obra para informar de los hallazgos a Concultura, para que esta investigue sobre el terreno. Los jornaleros, ahora, apilan los tiestos en bolsas plásticas y se toman los hallazgos en broma.


“Mire, aquí tengo un indio que le puedo vender. Ahí está, ¿ve? Con la pala en la mano, ja, ja, ja”, bromea uno de los jornaleros mientras señala con el dedo a uno de sus compañeros.
Miguel Fiallos, ingeniero y encargado del proyecto por parte de COPRECA, después de admitir que no informaron nada a Concultura, alegó ignorancia de la ley y agradeció a El Faro de “dar la alerta” a las autoridades con esta noticia.


Conversación con Miguel Fiallos, ingeniero y encargado del proyecto por parte de COPRECA
Fiallos agregó que cuando se construyó la calle de acceso al edificio de cancillería, atrás del mercadito de Merliot, incluso llegaron a encontrar “osamentas” y collares que fueron lavados por una lluvia copiosa. Desaparecieron y el testimonio de Fiallos es la única prueba de ese hallazgo. Eso hace más de dos años. Nadie se enteró de nada.


Shione Shibata, encargado del Departamento de Arqueología (DA), oficina adscrita a Concultura, un día después de que El Faro atestiguara la destrucción producida por los tractores (miércoles 20), informó que ya habían realizado una inspección en el lugar. El arqueólogo lamentó que las autoridades del MOP no hayan avisado antes para rescatar algunas de las piezas que los trabajadores comentan que de ahí se extrajeron… y que se vendieron a precios risibles.
“Yo vendí un cántaro a 25 dólares a uno de los supervisores del MOP. Una medalla que tenía labrado algo, así como un sol, a cinco dólares, y un plato también a cinco dólares”, dice otro trabajador. 40 dólares por una milenaria historia.


Los cultivos más grandes hasta ahora


En julio de 2007, fue el mismo Shibata quien descubrió, Diego de Holguín abajo, la primera evidencia de que bajo la tierra de la finca de café de El Espino hay una historia aún no descubierta ni contada. Shibata, quien trabaja en el país desde 1995 como arqueólogo –es graduado de la universidad de Doshisha y tiene una maestría de la universidad de Kanazawa, ambas en Japón-, encontró surcos de cultivo que datan del periodo preclásico y preclásico tardío (aproximadamente 420 d.C.), sepultados por la erupción del volcán Ilopango.

¿Sitio El Espino?Según el informe del DA de julio de 2007, “los surcos agrícolas permiten reconocer los límites funcionales de un asentamiento arqueológico el cual puede localizarse en algún sector muy cercano, con estructuras posiblemente. Estos rasgos agrícolas son considerados sitios arqueológicos secundarios, los cuales representan rasgos de actividad humana pretérita la cual sirve para reconocer un comportamiento sedentario hace más de 1,500 años”.
¿El número 68?En El Salvador existen 67 sitios arqueológicos que datan del mismo periodo (preclásico) en el cual se registran los surcos y restos arqueológicos identificados en El Espino.
El octavo surco de cultivoSurcos de cultivo en el país se registran ocho. Tres de los más importantes están en San Juan Opico: dos en Joya de Cerén (descubierto en 1989) y uno en Sitio El Cambio (70s).
También hay registrados en el Cerrón Grande (70s), Saburo Hirao (80s), Redondel El Platillo, en Ciudad Merliot (80s) y Diego de Holguín, en El Espino (2007).
El último hallazgo cerca de San SalvadorLos hallazgos en El Espino son parte de los más próximos a la ciudad capital que se registran en la arqueología salvadoreña. A la fecha, son los más novedosos. Uno de los últimos sitios registrados cerca de la capital fue Madreselva, en Santa Elena, un sitio arqueológico de primer orden que también fue arrasado en los noventas y que data del período posclásico (aproximadamente 900 d.C.).


Otros hallazgos en la capitalReportes del DA dan cuenta de otros hallazgos en San Salvador como el del cerro El Zapote, localizado en el Barrio San Jacinto, en los años 20; El Club Internacional, en el centro de San Salvador, a fines de los años 30; Loma Tacuazín, al sureste de San Salvador, en los años 40, y Barranco Tovar, en los años 50.
El arqueólogo japonés conducía su automóvil cerca del redondel Roberto d´Aubuisson, cuando sin querer observó a su mano izquierda, hacia el tramo sin construir del Diego de Holguín. Es este punto, El Espino ya no es del Estado. Es la parte de la finca que quedó a la familia Dueñas tras la reforma agraria de 1980. Shibata pidió disculpas a sus hijos y estacionó el carro. Bajó al terreno, confirmó sus sospechas e informó el 1º de julio de 2007 a Fabricio Valdivieso, para ese entonces todavía jefe del DA.
Valdivieso, en un informe posterior, concluyó que esos surcos de cultivo conllevan una importancia por su extensión (los más grandes registrados hasta el momento en el país) y por su cercanía con la ciudad capital. En la pared norte de la carretera, a siete metros de profundidad, los arqueólogos registraron un surco de 50 metros de largo. En la pared sur, a una profundidad que oscila entre los cuatro y seis metros, identificaron el otro surco. Mide 70 metros. Todavía no se ha identificado el tipo de cultivo, pero los expertos presumen que se trata de maíz.


Uno de los surcos de cultivo más cercanos –similares a los de Diego de Holguín- sólo se registran en sitio El Cambio, arrasado por la lotificadora Neila, propiedad de Mario Sol Bang, entre 2006, 2007 y 2008, bajo la mirada poco diligente de Concultura. En El Cambio, junto a los surcos, se encontraron entierros, fogones y un montículo. La importancia de los surcos de cultivo radica precisamente en que se infiere que junto a ellos existió una población aún no descubierta. Es decir, un sitio habitado por indígenas que ejercían su influencia en El Espino, el considerado último pulmón de San Salvador por su vegetación.


En la década de los ochentas, el descubrimiento de surcos de cultivo dio pie para que el mundo se maravillara ante Joya de Cerén (también en San Juan Opico), declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO en 1993. Joya es el único sitio arqueológico que demuestra cómo vivían los antepasados comunes y corrientes en Mesoamérica. Ahí, en Joya, junto a los surcos se encontraron viviendas. Joya data del clásico tardío (entre el 590 y 640 d.C). Esto significa, según Valdivieso, que en El Espino probablemente habitó una civilización de mayor antigüedad.
“De no haber sido por la maquinaria del MOP, nunca hubiéramos descubierto esos surcos. La capa de tierra que evidencia el surco de cultivo está hasta a siete metros (aproximadamente) del nivel normal del suelo, cubierta por la ceniza volcánica y el humus. Era imperceptible”, dice Shibata. “Es una lástima que aquí no haya una cultura en la población de conservación de la historia arqueológica. Sólo así se explica que no avisen nada. Estamos atados”, añade, en referencia a que los encargados de la obra no informaron del hallazgo.
El historiador Pedro Escalante Arce comparte la opinión de Shibata. Él, sin embargo, es más pesimista. “Se ha perdido tanto y se sigue perdiendo tanto… es una lástima. Se destruye, se pierde, se vende, se trafica. Es demasiada la riqueza arqueológica del país como para que el Estado pueda salvarla toda”, dice.


Un empleado de la empresa contratada para realizar la construcción de obras hidráulicas en el bulevar Diego de Holguín muestra un pedazo de cerámica encontrada en el sitio.
Las autoridades de Concultura informaron al MOP del hallazgo y se acordó preservar las paredes norte y sur que amurallan el terreno compactado por donde se construirá la carretera. Ambas entidades participaron de la opción de no divulgar nada del hallazgo al público. En octubre de 2007, un periodista de un matutino consultó a las autoridades de Concultura sobre el rumor del descubrimiento, pero la respuesta fue negativa.
Y no obstante que Shibata y Valdivieso adviertan de la posibilidad de que los restos de toda una civilización se encuentren en peligro de desaparecer, otro funcionario de Concultura, el director de Patrimonio Cultural, Héctor Sermeño, no luce parece estar muy entusiasmado con el descubrimiento. “Los surcos no necesariamente son vestigios arqueológicos. Sin querer demeritar el hallazgo de esos surcos, no se informó porque no todas las publicaciones que hace Concultura se hacen públicas. No tienen por qué hacerse públicas. Ahí no hay pruebas de edificaciones, no hay restos arqueológicos registrados. Se acordó con el MOP proteger la zona y así se he hecho”.


El ministro de Obras Públicas, Jorge Nieto, corrobora la versión de Sermeño e insiste en que no tiene conocimiento de que se hayan detectado más hallazgos que los surcos. “De lo que hemos tenido conocimiento –y que ha sido a través del viceministerio- ha sido de los surcos. Pero en ningún momento de vestigios arqueológicos”, dice. Nieto ignora por completo que a la par de cancillería y en una bóveda ubicada debajo del bulevar Jerusalén aparecieron más vestigios. Esos eran formas polícromas de barro cocido.
Sermeño dice que no tiene conocimiento de los vestigios encontrados en la zanja ubicada contiguo a Cancillería y señala que esperará el informe que prepare Shione Shibata para pedir cuentas al MOP y a Cancillería de los hallazgos. Sermeño, al aparecer, también ignora que el DA encontró más vestigios bajo la bóveda del Jerusalén, ya que insiste en que hasta el momento él sólo tiene conocimiento de los surcos registrados en julio de 2007.
Para ese mes, sobre la Diego de Holguín todavía soplaban las protestas de las organizaciones medioambientales y de la alcaldía de San Salvador por la tala de cientos de árboles en 4.2 manzanas del parque de los pericos, una zona protegida por decreto legislativo. También pesaba el atraso generado por una demanda judicial que la empresa COPRECA terminó ganando por $7.2 millones al MOP, debido a que la cartera cambió de forma irregular cambió los trazos de la misma durante la administración de David Gutiérrez, el ex ministro y amigo cercano del presidente Saca. Y fue justo en la zona en donde se alteró el trazo de la carretera –con la consecuente destrucción de las cuatro manzanas de Los Pericos, en la zona de reserva forestal- en donde en enero de este año se produjo el otro hallazgo que ignoran los funcionarios.


Más restos arqueológicos


Una formación “troncocónica”, en arqueología, se refiere a un depósito creado en la antigüedad para depositar objetos inservibles o inutilizables. El término más peyorativo para este deposito sería el de un “basurero”. Un basurero arqueológico utilizado por los posibles habitantes de El Espino.

Entre los objetos encontrados en la “posible formación troncocónica” ubicada al pie de la bóveda, arqueología detectó ollas rotas, vasijas quebradas y varios otros tiestos. Según un informe del DA fechado en enero de este año, estos hallazgos corroboran la presencia de actividad humana en el preclásico y de una posible vivienda que aún no ha sido ubicada (y quizá no sea ubicada jamás).
Con los tres hallazgos de El Espino, los expertos infieren que hubo una población que habitó El Espino alrededor de cinco o seis siglos antes que los pobladores de Madreselva en Santa Elena (900 d.C., periodo posclásico), ubicado a escasos minutos al norte de El Espino, y donde se especula estuvo afincado el señorío de Cuscatlán, hoy perdido por las edificaciones, las calles y las residenciales.


Los empleados que trabajan en la obra han recolectado varias piezas de barro encontradas en la zona de construcción.

En El Espino, la distancia entre el sitio del hallazgo de enero y el sitio del hallazgo de agosto es de 400 metros aproximadamente. En el camino se deja de lado el muro de protección de la Escuela Militar –por donde hoy se trabajan los planos corregidos por el MOP- y se pasa enfrente del casco de la finca El Espino. En línea recta, kilómetros arriba, se llega al inicio de la primera etapa del diego de Holguín (ya finalizada) que desde la colonia Jardines de la Sabana desemboca en la carretera hacia Los Chorros, rumbo al occidente del país.
“Aquí es poco, comparado con lo que ha salido en otras partes (de la carretera). Han salido toneladas de cosas de esas. Como se han roto, y el trabajo es masivo, se pierden las piezas. Desgraciadamente no había alguien aquí que supervisara”, inisiste Miguel Fiallos, de COPRECA.
¿Qué se perdió en El Espino? ¿Cuánto se ha perdido? Arqueología no reporta información acerca de los entierros que menciona Fiallos en la parte posterior del mercadito de Merliot ni otros hallazgos reportados en la construcción del edifico de cancillería, que cuenta con parqueo subterráneo. Ni en los edificios de la Universidad Matías Delgado. Tampoco en el resto de los 9.2 kilómetros de la carretera que atraviesa Santa Tecla y termina en el bulevar de Los Próceres, pasando Casa presidencial.
Si algo hubo más allá de la cerámica ahora rota tras el paso de los tractores, del pico y de las palas, o ya desapareció o sigue enterrado.
Zanja para obras de drenaje al costado poniente de las instalaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores, donde los trabajadores han encontrado recientemente piezas arqueológicas.
Lo curioso es que los hallazgos arqueológicos en la zona sí fueron reportados y guardados por las altas autoridades del MOP y Concultura. En la zona, tan alta es la actividad, que el informe de arqueología de julio de 2007 incluso reporta surcos de cultivos similares a los de Diego de Holguín en el terreno sobre el cual Grupo Roble actualmente construye un edificio de apartamentos contiguo a Multiplaza, frente a la carretera Panamericana.
“Asociados a estos yacimientos en ocasiones suelen encontrarse asentamientos arqueológicos con evidencias de actividad cultural, tales pueden ser estructuras domésticas aisladas o incluso contiguas a áreas ceremoniales del periodo preclásico. De este modo se tiene aquí una prueba que puede indicar la presencia de mayores rasgos culturales en un sector muy cercano a estos surcos, en algún lugar de la finca El Espino, o incluso especulando debió existir en donde ahora yacen las colonias del suroeste de San Salvador, o más al sur y oeste probablemente hacia zona urbana de ciudad Merliot en Santa Tecla. Sin duda, conforme a las pruebas, estos surcos se extienden hasta el sector del centro comercial Multiplaza, al sur”, resume el informe del Departamento de Arqueología.
*Con reportes de Rodrigo Baires
Lea, además:
Informe completo de surcos
Informe completo segundo hallazgo

viernes, 22 de agosto de 2008

Blackwater contrata más salvadoreños

Eric Lemus BBC Mundo, San Salvador

Otros 40 salvadoreños viajan a Irak y Afganistán.Un grupo de veteranos de guerra y ex policías salvadoreños viajará a principios de septiembre a Irak y Afganistán contratado por una agencia de seguridad subsidiaria de la estadounidense Blackwater.
La empresa Central American Professional Services (CAPROS) recluta a 40 hombres que destacará en esos países a lo largo de seis meses.
Los salvadoreños seleccionados para ir a Afganistán recibirán un salario de US$1.500 mensuales, mientras que quienes vayan a Irak US$1.020, según reveló uno de los aspirantes cuya identidad se mantendrá en reserva.
En un semestre, los soldados ganarían el equivalente a nueve salarios mínimos en El Salvador, que en el sector servicios y comercio alcanza US$174, tras el último ajuste hecho por el gobierno.
CAPROS fue creada por el coronel retirado Juan Emilio Velasco y el ex empleado bancario Marcos Chávez Castillo y opera como gestora local de la estadounidense Greystone-Ltd, que a su vez abastece con personal militar a Blackwater.
Experimentados

De esas personas no es responsable el gobierno de El Salvador porque viajan por su cuenta y riesgo
Presidente Antonio SacaEsta es la tercera vez que salvadoreños viajan a Medio Oriente bajo este concepto.
A inicios de 2005 la Compañía Integral de Agentes de Seguridad Privada (CIAP) sirvió como subcontratista de Triple Canopy, otra empresa estadounidense, que ofreció salarios entre US$2.200 y US$2.800 mensuales a los escogidos.
Pero desde noviembre de 2005 solamente CAPROS envía seguridad privada a Irak y ahora Afganistán tras someter a los interesados a exámenes físicos.
Uno de los aspirantes reveló a BBC Mundo que hizo pruebas de tiro en propiedades del ejército salvadoreño.
El periódico El Diario de Hoy denunció que CAPROS utiliza instalaciones militares para entrenamiento de sus aspirantes, pero las autoridades desmintieron esa información.
Sin responsabilidad

El Departamento de Estado de EE.UU. es el beneficiario final.Los seleccionados firman un contrato sumamente restrictivo que carga casi toda la responsabilidad en el empleado y exime a la empresa por una eventual tragedia.
El documento, del que BBC Mundo tiene una copia, precisa que "la compañía actúa en calidad de subcontratista dentro de una relación contractual cuyo beneficiario final es el Departamento de Estado de EE.UU.", de acuerdo con la sección Subcontrato de Servicios.
Asimismo, en el punto 11, el texto describe que "el contratista entiende y reconoce que el lugar de prestación de servicios es de alto riesgo, volátil, hostil y un ambiente extremadamente peligroso y que las autoridades militares están continuamente llevando a cabo operaciones militares en la región".
Más adelante, el texto dice que el empleado libera de toda responsabilidad a la compañía por cualquier tipo de incidencia.
De doble filo

Sus salarios están por debajo de la media de otros latinoamericanos.
El salario de los salvadoreños está por debajo de la media que tienen veteranos de países como Chile y Colombia, que llegan a US$2.500 al mes, afirmaron unos veteranos que aceptaron hablar con BBC.
"No puedo decir que fui a vacacionar a Irak... a cada paso que das estás arriesgado a que te caiga un mortero. ¿Qué me quedó de mi experiencia? Solo el terror", afirmó uno de los entrevistados.
Para el asesor jurídico Marcelo Marquelli, de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD), los seleccionados "firman un contrato inexistente que viola el código de trabajo salvadoreño y todas las normas de la Organización Internacional del Trabajo" (OIT).
"Al final es la necesidad de la gente la que la lleva a firmar contratos mercenarios", valora Marquelli.
Bajo riesgo
Hace una semana partió el décimo primer contingente del Batallón Cuscatlán con 200 integrantes a Irak y el presidente Antonio Saca siempre ha tomado distancia respecto al papel de las agencias privadas.
Antonio Armendáriz

Es obligación del Estado que estas compañías no se aprovechen de la necesidad de los salvadoreños
Diputado por el PCN"De esas personas no es responsable el gobierno de El Salvador porque viajan por su cuenta y riesgo", afirmó el mandatario.
Sin embargo, el diputado del Partido de Conciliación Nacional (PCN, centroderecha), Antonio Armendáriz, afirmó a BBC Mundo que "es obligación del Estado que estas compañías no se aprovechen de la necesidad de los salvadoreños".
En tanto, el vocero del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), Sigfrido Reyes, señaló que "en nuestro país se ha perdido el respeto por la soberanía y al final se alienta y encubre este tipo de empresas".
El Salvador es el único país latinoamericano oficialmente con tropas en Irak y, a lo largo de cinco años, ha sufrido cinco bajas mortales y una veintena de heridos.

domingo, 17 de agosto de 2008

El Papa, contra el racismo

El Papa, contra el racismo
David Willey BBC, Roma

Oremos por que en todas partes crezca el respeto por todas las personas, junto al conocimiento responsable de que sólo mediante la recíproca bienvenida de todos es posible construir un mundo marcado por una justicia auténtica y una paz verdadera
Papa Benedicto XVI

El papa Benedicto XVI se sumó a una polémica sobre el racismo en Italia, al pedirles a los cristianos de todo el mundo a oponerse a la intolerancia contra los extranjeros.
Su intervención tuvo lugar pocos días después de que la revista católica de mayor tirada en Italia, Famiglia Cristiana, criticara las políticas del gobierno de Silvio Berlusconi para frenar la inmigración ilegal.

Desde su residencia veraniega en Castel Gandolfo, cerca de Roma, Benedicto XVI se dirigió a peregrinos y turistas y dijo que "en diversos países" -sin nombrarlos, pero claramente también refiriéndose a Italia - hay "nuevas" y "preocupantes" manifestaciones de racismo.
El Papa señaló que aunque estas manifestaciones "con frecuencia están vinculadas a problemas sociales y económicos, jamás pueden justificar el desprecio y la discriminación racial".
Benedicto XVI hizo referencia a un pasaje del Antiguo Testamento sobre el deber de recibir a los extranjeros y pidió orar "por que en todas partes crezca el respeto por todas las personas, junto al conocimiento responsable de que sólo mediante la recíproca bienvenida de todos es posible construir un mundo marcado por una justicia auténtica y una paz verdadera".

viernes, 15 de agosto de 2008

Fisco libera al Banco Cuscatlán

Fisco libera al Banco Cuscatlán de pagar $5.9 millones en impuestos

Hacienda determinó que el banco debía pagar $5.9 millones en concepto de renta. El caso pasó al Tribunal de Apelaciones del Ministerio, donde dos especialistas en impuestos internos votaron a favor de que el Banco pagara pero fueron vencidos por los otros tres miembros del Tribunal.
Sergio Arauzcartas@elfaro.net
Publicada el 11 de agosto de 2008 - El Faro

A las 8:50 de la mañana del miércoles 26 de abril de 2006, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) resolvió que el Banco Cuscatlán debía al fisco 5.9 millones de dólares en concepto de impuesto de renta correspondiente al año 2002.
Hacienda descubrió, entre otros hallazgos, que en 2002 el Banco obtuvo 1.2 millones de dólares en ganancias por el cobro de comisiones a clientes que tienen créditos con la institución. La auditoría realizada por la DGII determinó que el Banco Cuscatlán no declaró dichos ingresos como ganancias. El monto exacto no declarado, según la resolución del Tribunal de Apelaciones de Impuestos Internos a la que tuvo acceso este periódico, asciende a un millón 255 mil 166.54 dólares en concepto de comisiones cobradas por el otorgamientos de créditos.
La dirección de impuestos internos defendió el cobro del impuesto amparado en lo que dice la ley del Impuesto sobre la Renta, que establece como concepto de Renta a todos los productos o utilidades percibidas o devengadas y por tanto el dinero por el cobro de comisiones a los clientes de los bancos que tienen crédito con la institución es una ganancia o utilidad que debe pagar el impuesto.
El Banco tampoco declaró como ingreso la utilidad obtenida por la venta de activos extraordinarios, es decir bienes que la firma bancaria vendió al contado o con financiamiento. El Banco Cuscatlán alega que los bienes recibidos en pago no deben incluirse como ingresos porque ello no significa una ganancia o utilidad hasta que estos hayan sido terminados de pagar. El monto no declarado en ese punto no está detallado en el documento de Hacienda.
Los auditores de Impuestos Internos también descubrieron que el Banco omite declarar como ingresos la recuperación de un crédito o bien. Sin embargo, el documento no detalla los montos que ilustran lo no declarado en dicho rubro.
El Cuscatlán, comprado por $1 mil 510 millones de dólares por el gigante financiero de Estados Unidos, Citigroup, apeló y consiguió de librarse de todos los señalamientos en un Tribunal adscrito al Ministerio de Hacienda.
El tribunal está compuesto por un presidente y cuatro vocales, dos especialistas en impuestos internos y dos especialistas en aduanas. La instancia, entre otros asuntos de materia tributaria y de aduanas, se encarga de resolver casos de contribuyentes inconformes con las auditorías de la dirección de impuestos internos.
Las dos personas expertas en asuntos tributarios que votaron porque el Banco Cuscatlán pague el impuesto sobre la renta perdieron ante los otros tres miembros del Tribunal, los que no son especialistas.
Una de las personas que votó contra la resolución de librar del pago al Banco se llama José Magdaleno Molina. Este, antes de ser vocal del Tribunal de Apelaciones de Impuestos Internos y Aduanas, también fue coordinador del área de fiscalización de la Unidad de Principales Responsables Tributarios de la Dirección General de Impuestos Internos. Tiene más de 20 años de experiencia. Román Carballo, abogado y vocal del mismo Tribunal desde hace más de 10 años, también votó contra el Banco. Los dos defendieron la resolución de la Dirección de Impuestos Internos que ordenaba el pago de Renta.
Ambos especialistas del Tribunal calcularon que la deuda en pago de renta no era de 5.9 millones de dólares, como estableció la dirección de impuestos internos, sino de 3.9 millones. El 10 de enero de este año, con tres votos, el Tribunal falló a favor del Cuscatlán. La resolución de 65 páginas incluye 18 incómodas hojas en las que dos votos disidentes razonan que el banco debe pagar impuesto de la renta.
Uno de los argumentos es que las leyes tributarias no establecen diferencias entre los contribuyentes a la hora de cobrar el impuesto. Es decir, que a jucio de los votos disidentes el Estado no puede favorecer o dar tratamiento preferencial a ninguna persona jurídica eximiéndole pagos de impuestos que otros contribuyentes sí pagan: "No existe ley ni tampoco que el legislador haya previsto situaciones particulares o tratamiento especial o diferenciado de las otras personas jurídicas sujetas al impuesto de la renta cuando realicen hechos generadores del impuesto”.
Tanto José Molina como Román Carballo explican que las leyes tributarias están por encima del cualquier otro reglamento y por tanto los registros del banco demuestran claramente que deben pagar el impuesto: “Todos los registros y anotaciones contables y financieros que la sociedad contribuyente ha elaborado y que demuestra su verdadera situación financiera frente al fisco debe analizarse e interpretarse a la luz de lo establecido por la normativa tributaria y responder de sus obligaciones fiscales sin que ningún otro régimen legal de la categoría de normas secundarias modifique su situación frente al fisco, de ahí que la normativa de naturaleza contable y financiera emanada del Consejo Directivo de la Superintendencia del Sistema Financiero jámas puede llegar a prevalecer a los efectos fiscales sobre las leyes tributarias en vista de la explicitud y claridad de la disposición del artículo 9 del código tributario.”
Los datos que contienen los ingresos del banco usados por Molina y Carballo fueron sacados de la auditoría realizada por la Dirección General de Impuestos Internos. Según el cuadro de ingresos y gastos que contiene la resolución del Tribunal, en 2002 la firma financiera obtuvo ingresos por más de 190 millones de dólares (190 millones 787 mil 888 dólares).
Los votos a favor del banco fueron de Sara Carolina Rico González, abogada, ex apoderada del organismo que tuvo por responsabilidad sanear la banca reprivatizada -FOSAFI, Fondo de Saneamiento y Fortalecimiento Financiero-; Rodolfo Hernán Martínez, ex fiscal que representó al Estado en casos de secuestro -como el del locutor Riley Serrano- y Carlos Villacorta, ex asesor de la sala de lo contencioso administrativo de la Corte Suprema de Justicia, que ahora preside el Tribunal de Apelaciones de Impuestos Internos y Aduanas.
Al buscar a los encargados de la resolución y la postura oficial de Hacienda, la oficina de comunicaciones de la institución explicó que no están autorizados a hablar sobre contribuyentes específicos. “No podemos hablar, nos lo prohíbe la ley, habla de la confidencialidad de contribuyentes, es en el artículo 28 del código tributario donde está”, dijo Roberto Berríos, de la oficina de prensa del ministerio.
En efecto, el artículo 28 dispone que los funcionarios que por el desempeño de su trabajo conozcan sobre la base de ingresos gravable o sobre los impuestos cobrados a determinado contribuyente, guarden absoluta reserva acerca de la información que conozcan.
La auditoría de la reforma
La tabla de ingresos totales del Cuscatlán, con deducciones de impuestos y costos, es producto de la primera auditoría realizada a la firma. El estudio, impulsado en ese momento por el director y subdirector de impuestos internos, Luis Barahona y José David Avelar, respectivamente, determinó que el Banco tenía que pagar 5 millones 958 mil 800 dólares con 25 centavos en concepto de impuesto sobre la renta. Ambos funcionarios, últimos cerebros de la reforma fiscal impulsada por el entonces Ministro de Hacienda Guillermo López Suárez y aprobada en noviembre de 2005, fueron reemplazados por el actual ministro, William Hándal.
La investigación de impuestos internos empezó antes de que el Cuscatlán pasara a manos extranjeras. De hecho, el presidente de la junta directiva todavía no era Mauricio Samayoa. La noticia de que debía pagar impuestos la recibieron en abril de 2006, ocho meses antes de que el conglomerado financiero cerrara trato en Nueva York con el gigante financiero de Estados Unidos, Citigroup, el 14 de febrero de 2006.
El estudio de Hacienda afirma que la institución bancaria, ahora en manos de Citigroup, no declaró ni reconoció los ingresos que detectó Impuestos Internos. Según un cuadro del documento que contiene la resolución final que libra al banco del pago, en 2002 la firma financiera no declaró 11.3 millones de dólares. Sin embargo, el Tribunal de Apelaciones falló a favor del banco y determinó que no había reconocido sólo 1.6 millones de dólares. El tribunal impuestos internos condonó el total de ingresos que deberían pagar renta según lo descubierto por la dirección general de impuestos internos.
El tiempo y las fechas en las que el Banco recibió la resolución de la DGII coinciden con la salida del ministro Guillermo López Suárez. El 26 de abril de 2006, la DGII resolvió que el banco debía en impuestos $5.9 millones, dos días, el 24 de abril, López Suárez hizo pública su renuncia con la aclaración de que terminaría sus labores el último día del mes.
La reforma fiscal impulsada por López Suárez pretendía que la banca erogaría más dinero en concepto de impuestos. Impuestos internos realizó la primera investigación para fiscalizar las cuentas del Banco Cuscatlán luego de aprobada la reforma.
Uno de los 11 cuerpos legales modificados que integraron la reforma fiscal de López Suárez abrió la posibilidad a los auditores de Hacienda para fiscalizar a grandes contribuyentes. Luego de entrada en vigencia la reforma fiscal, el fisco recibió casi 10 millones de dólares más en concepto de impuesto sobre la renta cobrados a los bancos.
Entre otras reformas, también fue modificada la ley de creación del Tribunal de Apelaciones de Impuestos Internos y Aduanas, instancia que estudia y resuelve los casos de contribuyentes inconformes con lo determinado por Impuestos Internos.
López Suárez, el ex ministro de Hacienda, revela que uno de los problemas que previeron cuando se estudió la reforma fue la integración del Tribunal de apelaciones con dos expertos en aduanas, el presidente, y dos expertos en materia tributaria: “Nosotros, cuando estábamos con la reforma fiscal, vislumbramos como potencial problema que 3 votos de no expertos podrían vencer a los (dos) votos expertos en impuestos”, dice el ex ministro.
Según la ley, todos los miembros del Tribunal son nombrados por el ministro de Hacienda. Los funcionarios del actual tribunal fueron nombrados por López Suárez.
La defensa del Banco
El Banco Cuscatlán aún no había sido vendido a la firma internacional Citigroup cuando inició el juicio. La defensa legal fue realizada por el despacho de Abogados Portal y en el texto elaborado por la firma desarrolla siete puntos en los que sostiene que el cobro del impuesto sobre la renta no es legal y que el banco no tuvo suficiente tiempo de respuesta.
El Faro realizó durante tres semanas gestiones para buscar una postura oficial del banco, pero hasta el cierre de esta edición la encargada de comunicaciones de la institución, Astrid Palomares, no había podido agendar una entrevista u obtener una postura oficial. Pero en la resolución del Tribunal se incluyen los argumentos del Cuscatlán para apelar el cobro de impuestos.
En el documento, la firma que representa al Banco sostiene que han fundamentado sus registros y anotaciones contables y financieras amparados en las Normas de Contabilidad Bancaria emitidas por la Superintendencia del Sistema Financiero. La dirección de impuestos internos y los votos disidentes, sin embargo, defienden que por encima de las normas de contabilidad bancaria están las leyes tributarias específicas al pago de renta.
Entre otras objeciones, el Banco sostiene que hubo ilegalidad en el procedimiento de fiscalización: “la actuación practicada por los auditores designados es ilegal y arbitraria, la Dirección General de Impuestos Internos al decidirse por fiscalizar a un contribuyente ordena hacerlo y nombra auditores fiscales, lo que hace saber; sin embargo, (....) no basta con expresarle su decisión, debe razonar el por qué se ordena fiscalizar, debe en consecuencia motivar esa resolución”, dice el documento que recibió la oficina de Portal 11 de enero de este año.
Según la firma que representa al Banco, los cálculos de los auditores no han sido realizados de la forma correcta pues hay ciertos rubros que no deben ser incorporados como ingresos gravados.
El alegato del Banco Cuscatlán concluye que se le ha violado el derecho constitucional de audiencia y reclama que la administración tributaria tuvo 26 meses para investigar y liquidar el impuesto de la renta, y que a la institución privada se le concedió solo 5 días para defenderse. Sin embargo, el Tribunal de Apelaciones determinó que sí había motivación para fiscalizar al banco y que se le respetó el derecho de respuesta establecido en la ley, que concede cinco días para responder.
Quien recibió la notificación por parte del Banco fue Sonia Espinoza, quien según la resolución es secretaria de la oficina que representó a Roberto Ortiz Ávalos, que aparece en el documento como representante legal del Banco Cuscatlán. Al pedir más detalles de la defensa del Banco, Espinoza explicó que la encargada de llevar ese caso era Magdalena de Sosa. Sin embargo, en la oficina de Portal no respondieron a la petición de entrevista. El caso que perdió el Estado contra el Banco Cuscatlán sienta un precedente legal a favor de las instituciones financieras.

jueves, 7 de agosto de 2008

Celebración del martirio de Alirio Napoleon Macías

Parque de San Esteban Catarina

Iglesia Parroquial de San Esteban Catarina


Parroquia de San Esteban Catarina

Valle Jiboa y el volcan Chinchontepec