Funes entregó condecoración póstuma a jesuitas
El ministro de Defensa aseguró durante el acto conmemorativo que la Fuerza Armada está dispuesta a pedir perdón y que, de ser requerido, podrían abrir los archivos del Estado para establecer los hechos.
Escrito por Marcela Solís Lunes, 16 noviembre 2009 11:51 El presidente de la República, Mauricio Funes, entregó hoy en Casa Presidencial un reconocimiento a los sacerdotes jesuitas asesinados el 16 de noviembre de 1989.
Funes entregó a los familiares de los sacerdotes jesuitas la orden nacional José Matías Delgado, en el Grado de Gran Cruz Placa de Oro, por servicios extraordinarios prestados al país.
Funes dijo que la condecoración es una de las formas en que el gobierno hace un acto público de desagravio por los errores que como Estado se cometieron en el pasado, especialmente en el caso del asesinato de los sacerdotes jesuitas.
"Retirar un velo espeso de oscuridad y mentiras, empezar a limpiar nuestra casa es la historia reciente. Queremos que este sea un acto de la recuperación de la memoria colectiva", afirmó el presidente de la República.
El rector de la Universidad Doctor José Simeón Cañas (UCA), José María Tojeira afirmó que la paz actual se la debemos a las víctimas inocentes que son las que representan la historia actual.
"Amparados en el perdón y en el olvido se ha dejado pasar esto para darle paso a la impunidad en el país", afirmó el sacerdote jesuita.
Funes hizo un llamado a la unidad e insistió en que espera que la inspiración de los jesuitas lo acompañe en todo su gobierno con los valores de justicia, verdad y humanidad.
"Se puede matar al maestro, pero la semilla sigue germinando; esa semilla germina en aras de la solidaridad del país", finalizó Funes.
El ministro de Defensa, David Munguía Payés, en una declaración sin precedentes, expresó que la Fuerza Armada está dispuesta a pedir perdón por los crímenes de guerra y a abrir los archivos del Estado si una autoridad competente así lo requiere.
"Yo formo parte del gobierno. Yo no puedo abrir los registros. Si la autoridad competente me pide abrir los registros, los voy a abrir", expresó el militar.
El Procurador de Derechos Humanos, Óscar Luna, por su parte, aseguró que la entrega del reconocimiento es un hecho trascendental y sin precedentes, insistió en que debió haberse hecho mucho antes. "Es un hecho de humanidad y de justicia. A partir de este momento debe iniciarse un proceso. Es el inicio de una nueva página", aseguró el procurador.
Los jesuitas españoles Segundo Montes, Ignacio Ellacuría, Ignacio Martín Baró, Armando López, Juan Ramón Moreno y el salvadoreño Joaquín López fueron ejecutados en el interior de la Universidad Centroamericana UCA, de esta capital, en momentos que la guerrilla lanzaba la mayor ofensiva en el país.
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