martes, 20 de julio de 2010

Discurso del Presidente salvadoreño en la Cumbre Extraordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno del SICA

Funes pide a centroamericanos rechazar "provocaciones" de golpistas

20 de julio 2010

fragmento del discurso del Presidente Funes:

Amigas, amigos:


La mayor vulnerabilidad centroamericana es, sin duda, la injusticia social que ha determinado niveles inaceptables de pobreza estructural, urbana y rural, que alimentan el círculo vicioso del atraso y la
exclusión, factores también del subdesarrollo.

Somos quizás la región más injusta del planeta, donde se dan las brechas más escandalosas entre los muchos pobres y los pocos ricos.

Avanzar juntos en la lucha contra la pobreza, la injusticia distributiva y establecer metas comunes en salud, educación, cobertura de servicios sociales básicos y, en definitiva, establecer una agenda de desarrollo inclusivo, es una meta ineludible si queremos construir nuestra unión sobre bases sólidas.

Y finalmente, pero no menos importante, nuestra región enfrenta, lamentablemente, problemas de vulnerabilidad institucional, que ponen en peligro nuestro progreso, la estabilidad de nuestras democracias y
el éxito del proyecto integrador.

Esta es una realidad a la que no podemos dar la espalda y frente a la que debemos estar especialmente alertas.

A pesar de que, como decía al principio, nuestros países gozan ahora de regímenes democráticos, existen todavía sectores políticos, económicos y militares que justifican las prácticas golpistas y que han manifestado públicamente su apoyo a liderazgos que violentaron el sistema democrático.


Como Presidentes de regímenes elegidos democráticamente no podemos permitir ese tipo de provocaciones. Debemos dar un mensaje claro a aquellos que quieren relativizar la importancia de la democracia, de nuestras constituciones y de la voluntad soberana de nuestros pueblos.


Hablemos claro, porque en esto no puede haber medias tintas. O se está con la democracia y el Estado de Derecho o se está con los golpistas.


La respuesta de la región debe ser contundente: con democracia todo, sin democracia nada. Nosotros entendemos que sólo hay un modo de resolver los problemas de la democracia; y es con más democracia.

De manera que la estabilidad es un objetivo central del renovado proceso integrador que estamos poniendo en marcha.

Todos estos retos y la búsqueda de soluciones para enfrentarlos ocuparán la agenda de esta reunión, pero no se agotarán en ella. Serán los cinco ejes fundamentales sobre los que planteamos el relanzamiento de la integración centroamericana que, por su pertinencia y trascendencia, creemos deberán centrar nuestros esfuerzos al menos durante los próximos años.

La integración social, la integración económica, la integración en seguridad, la integración para enfrentar las consecuencias del cambio climático y el fortalecimiento de la institucionalidad regional y nacional son desafíos para los que no encontraremos respuestas fáciles ni fórmulas mágicas pero que, definitivamente, debemos abordar con responsabilidad y decisión.

Estimados colegas, hermanas, hermanos de Centroamérica:

Debemos ser francos y reconocer la importancia de la integración y dotarla de los mecanismos institucionales y de los recursos que necesita para lograr sus objetivos.

Debemos ser conscientes de que para alcanzar las metas propuestas serán necesarios sacrificios y compromisos, porque solo hay un camino para avanzar unidos: el del consenso y la cesión de soberanía.

Si estamos dispuestos a aceptar ese compromiso con madurez y generosidad, sin ceder a las presiones de los distintos sectores que quieren imponer su agenda y establecemos como única prioridad el bienestar de nuestros pueblos, conseguiremos construir el Sistema de Integración que una nuestros destinos para un futuro mejor.

Estoy convencido de que este relanzamiento se convertirá en el punto de inflexión que necesitamos para iniciar una nueva era de la integración. No haremos otra cosa que cumplir con el mandato de quienes hace doscientos años concibieron la unión de los pueblos centroamericanos como condición necesaria de nuestra independencia.

Gracias a todos de nuevo por su presencia, que Dios les bendiga, que Dios bendiga a los pueblos de Centroamérica.

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