sábado, 29 de octubre de 2011

La reunificación imposible: los niños deportados de El Salvador

Aunque el gobierno de El Salvador desestimula la emigración ilegal, cada año siguen partiendo sin autorización niños hacia los Estados Unidos en busca de sus padres.


Pero quienes no llegan y sobreviven al secuestro o el abuso, vuelven deportados, aunque regresan con la idea de intentarlo de nuevo, como lo relata uno de estos niños que contó su historia a BBC Mundo.

"Me espera mi mamá"
Contenido relacionadoEl Salvador sufre lluvias peores que un huracánEcologistas: blanco fácil en El SalvadorEl Salvador plantea servicio militar para alejar a jóvenes de pandillas

Mi nombre es Alan y en los Estados me espera mi mamá. Ella mandó el dinero. De aquí me fui en bus hasta la frontera con Guatemala y pasé el puente sin que me detuvieran porque el guía tenía todo arreglado con unos tricicleros que llevan y traen gente, así que yo me fui pedaleando para el otro lado como si llevaba cliente.
En Guate dormimos en unos hoteles, pero no nos dejaron salir de los cuartos. Allí nos llevaban unos panes para que comiéramos.
No estuvimos mucho. Dos, tres días. Lo feo fue cruzar el río para pasar a México. Eso sí fue jodido porque era algo hondo y la corriente casi me lleva.
Pero ya en el otro lado nos llevaron a otro hotel donde creo que estuvimos cinco días. No había salvadoreños. Éramos nueve en total, pero todos eran gente desconocida de Guate, Honduras y México…

¿Cómo avanzamos? En bus. A veces avanzamos largo. Desde Arriaga hasta el D.F., recuerdo que hicimos 17 horas. Y desde el D.F. hasta Monterrey hicimos algo igual. En el camino nos detuvieron, pero solo eran federales o soldados, pero no nos hicieron nada.

"Violan, asaltan…"
Durante las entrevistas, los agentes buscan identificar a aquellos que han sufrido algún tipo de abuso para iniciar una denuncia judicial.

Una vez nos bajaron, pero nos dejaron ir. En el bus íbamos separados. Tres adelante, otros atrás y otros tres en medio, pero separados, sin hablar. Todos en silencio. Cuando nos bajaron ni nos miramos… el guía tenía todo controlado.

Pero México es bien jodido. Es que te violan, te asaltan, es perro… conocí a un chavo bien cholo que igual lo habían trincado entre cuatro. Pero él dijo que iba a seguir, que no volvía.

En el camino uno va conociendo bastante gente, pero al rato el guía te separa.

Al final me detuvieron abajito de Reynosa en un lugar que casi no recuerdo. A esa altura iba con un tío, bueno, no era nada mío, pero así tenía que decir. No llevaba nada. Ni un papel. Así que el guía me dejó ahí tirado.

De ahí me llevaron a San Luis Potosí y después al D.F. y después a Tapachula… en México anduve algo así como un mes entre el viaje de ida y la regresada. Es bien jodido. Ahora voy a descansar un rato...
http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/11/110808_ninos_deportados_centroamerica_cr.shtml







Restaurante Torola, Barrio El Centro,
San Luis de La Reina

1 comentario:

Alma Ramos dijo...

Es fantastico ver como cada uno de los alumnos pone tanto empeño en lo que hace.... es fasinante!!! creo que cada uno de nosotros aprendio y aprendera muchas buenas enseñanzas... la musica me a cambiado muchisimo en muchos aspectos y creo que todos mejoramos cada dia... :)